Danielside

informática softwarelibre divagaciones música

Inteligencia

La lenteja necesita agarrarse a algo para crecer y no caer. Como no le había puesto ningún tutor, se agarra a lo primero que pilla, que es una planta de ajo.

A mi la verdad es que me alucinan estos alardes de inteligencia de cosas que, por ser «normales», no son dignas de nuestra atención: ¿como selecciona su punto de agarre? ¿cómo sabe donde está? ¿cómo detecta el grosor para poder enrollarse alrededor? ¿Están efectivamente «hablando» o «negociando»? ¿Por qué el ajo no lo rechaza? ¿gana algo?…

Se da por sentado que el humano es la raza suprema en este planeta, pero es una opinión que proviene del propio humano, lo cual en mi opinión lo invalida. Quizá solo porque habla con palabras (la mayor parte del tiempo, grita) y resuelve transformadas de Fourier, se considera el ser superior. Pero en los últimos años se han ido transfiriendo cada vez más características que creíamos exclusivamente humanas, a animales y plantas.

Mientras no sepamos respetar adecuadamente a todas las formas de vida y comprender nuestro papel en este planeta, «no habrá paz para los malvados».


Archivado en categoría(s) Divagaciones

Enlace permanente



Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.